CALLE CONCORDIA

CIUTAT VELLA / 19740

Empieza en la C/ Serranos y termina en la C/ Portal de Valldigna.

Denominase así porque sobre la puerta principal de la iglesia de san Bartolomé existió una gran hornacina con una imagen de Nuestra Señora de grandes proporciones que se titulaba de la Concordia porque solía llamarse a estos altares, tan abundantes antiguamente en las encrucijadas de callejuelas de nuestras barriadas concordias. No obstante, la advocación con que más se divulgó esta imagen fue la que el pueblo solía darle, que era la de Mare de Deu Grossa.

Concordias, eran agrupaciones de devotos que sostenían a sus expensas el gasto de una capillita que solían tener en su calle bajo una determinada advocación. Este altar o capillita era un pequeño retablo colocado a una altura regular en la pared de cualquier casa. Nunca les faltaba algún adorno de flores y de noche el indispensable farolillo, cuya iluminación sostenía el barrio.

Del Marqués de Cruilles tomamos que por los años 1815 a 1819 el número de estos retablos en la ciudad era de 608, de los que descontando 84 que correspondían a las portadas de las iglesias y conventos los 524 restantes se hallaban repartidos por las calles y plazas de la ciudad. 80 estaban dedicados a Nuestra Señora del Rosario, 43 a la Trinidad, 38 a san Roque, 36 a la Virgen de los Desamparados, 33 a san Cristóbal, 32 a san Vicente Ferrer y en menor número a las demás advocaciones de la Virgen, san Antonio Abad, san Antonio de Padua, santa Ana, el Santo Bulto de Jesús, san Bartolomé, san Benon, santa Barbara, Santísimo Cristo, Santo Angel Custodio, Ecce Homo, santa Faz, san Felipe Neri, san Francisco de Asís, san Gil, Beato Gaspar Bono, san Ignacio de Loyola, san José, san Joaquin, san Jaime, san Judas Tadeo, san Luis Beltrán, san Miguel, san Martín, santa Margarita de Cortona, santa Marina, san Nicolás Obispo, san Pedro Pascual, san Pascual Bailon, Beato Nicolás Factor, Santísimo Sacramento, Sacra Familia, Santo Tomás de Aquino, Santo Tomás de Villanueva y santa Teresa.